El miércoles arrancó la segunda manga del social más social donde venían a pelear por el billete a la final “Stroke me to the boast” y “Bares… Qué lugares”, mientras que en la pista de al lado “Desquashito” y “Bola de partido” no querían ser los que se disputen la cuchara de madera el sábado.
Los siempre animosos participantes de este torneo vestían sus mejores galas para la ocasión y hasta el mismísimo Carlos Martínez sacó del armario una camiseta técnica.
Por el cuadro de consolación todo iba como la seda y los contrincantes parecían entenderse bien como muestran las imágenes. Tras haber sufrido una madrugada de despachos el lunes el squash fue el protagonista y se vieron grandes duelos: Juan Alcocer ya sin colitis consiguió arrancarle un juego al mestre de Rafelbunyol, Sandro se desgañitaba jugando pero acabaría perdiendo con Pablo José Ortega y el jefesito Martos caería contra el mejor revés del mundo en la última partida. Pese a todo Desquashito se sacó la espina de la primera jornada y pasaba para jugarse el 5º y 6º puesto la última jornada.
En la semifinal de todo era calma, armonía y paz, como una de esas tardes de finales de Agosto que preceden a la tormenta. La capitana Steina seguía convaleciente tras el duelo con José Carlos que propició la oleada de discusiones, de consultas a los viejos sabios del squash y de acúmulo de colillas en los ceniceros de los despachos. Pero como no podía ser menos en el torneo de la germanor hubo tiempo para la reconciliació y esperamos que la Steina torni aviat.
Mientras tanto, como si nada fuera a pasar se seguían dando pelotazos en las pistas, a veces hasta literalmente, como fue el caso del Colado malo a Nial Sawa, que mantuvo la compostura como un gentleman y parecía más cabreado por perder un punto que por llevarse dos de color amarillo tatuados en la piel. Las mejores partidas de la jornada fueron las de Óscar So-Tonic VS Jordi Rock & Ripoll y Calleja Vader VS Javier Gracia, que se llevaron los segundos en el quinto juego con puntos agónicos en el desenlace.
Pau Bares tomó la alternativa de manos de su propio padre como las grandes figuras. Sustituyó a la lesionada capitana defendiéndose del squash académico de Helena como solo un Bares sabe hacer.
Carlos Ruiz cayó ante el enfant terrible que tenía mucha mucha prisa (por lo que sea) y por ser algo tan excepcional se le dejó pasar primer (por lo que sea).
Casi al final el capi de Alboraya Toni Parra cayó ante Javi Tomás, quien se vio beneficiado claramente por haber jugado con la raqueta que le prestó Alcocer, la cual viene enseñada de casa. Total hasta aquí eliminatoria empatada a falta de la segunda partida de Racket la cual el jugador del equipo de Bares no podía disputar (también por lo que sea). El nº 1 del equipo, Adrián Bares, todo un caballero elegante (a la par que sencillo) se ofreció a jugar en su lugar contra JL Moreno, ganó el punto definitivo y estalló la bomba informativa.
El equipo rival se quedó con esta cara
Lo que sucedió después te sorprenderá… Hicieron el petate, se ataron las botas, prendieron antorchas y salieron al grito de: “¡¡¡A los despachos!!!”
No se veía algo así desde la liga de los 22 equipos y tras horas y horas de debate, de volver a convocar a los viejos del lugar y volver a consumir cartones de tabaco, el equipo Stroke me to the boast pasa a la final.
Y colorín colorado, lo que empezó como ji ji ja ja quedó así:
Salut i Squash
Muy bueno, Iván.
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