Algunos piensan que las tradiciones, como las estadísticas, están para romperlas. Y eso pasa hoy aquí. Cuenta la Leyenda, -ni escrita, ni negra-, que un debutante que viaja más allá de la frontera de la Comunitat debe pagar el peaje de la crónica...¿Beldad? Así lo hizo el de Gales cuyo pedazo de ídem si hizo tan viral que a todas horas se relee.
Dicho esto, venga, vamos a respetar las tradiciones. Y qué mejor que con una imagen de la Catedral. Ya sabéis que allá por donde vamos inmortalizamos la de la sede lugareña del campeonato:
Sentimos no aportar datos del estilo arquitectónico, que se dejan para los entendidos. Esos mismos dicen que lo que pasa en el vestuario es sagrado y que no debe salir nada de allí. Aprovechando que tot es mentira y la baja calidad de la instantánea...
Que no falte la esperada foto del derby de semifinales, a tope y posado original nunca jamás visto...
Comentarios aparte y fuera de lugar sobre el estado de las paredes, decir que la victoria del "galés" fue contundente.
El resto estuvo a su altura disputando con hartura más partidas que nunca: 3-3-3 y ¡¡¡5!!!.
Fuimos estupendamente tratados por su anfitrión, Angel Pedro. Terminamos sobre las 16.30 horas, nos tomamos las sobras del Aquilino Bar (de a 10 euros y no de a 35) y nos volvimos a Valencia con dos copas de más.
En la última del año y por aquéllo de no variar...
Salut i Squash.
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